lunes, 26 de noviembre de 2012
viernes, 23 de noviembre de 2012
"Eres la luna sobre el mar verde, tan fría.
Se puede caer tan profundo intentando llegar hasta ti..."
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Hoy todas las princesas están de resaca.
Y cabreadas porque alguien dejó publicidad en sus parabrisas. Yo no me metería con ellas, no hoy.
Tienen las uñas rotas.
La temperatura de sus frentes crea vaho en el frío aire del domingo. La habitación está llena de humo silencioso (gargantas secas y bocas pegajosas), una incluso se comió su colilla la noche anterior.
Las princesas tienen el pubis tatuado con flores y más flores que solo hacen que parezca que ellas enteras se van a romper en cualquier momento.
Podrías decir que buscan mariposas y abejas que las besen, pero solo realmente quieren dejar de llorar por el dolor de cabeza.
¿No se puede vivir tan fuerte, princesitas? ¿No se puede morir tan suave?
Y cabreadas porque alguien dejó publicidad en sus parabrisas. Yo no me metería con ellas, no hoy.
Tienen las uñas rotas.
La temperatura de sus frentes crea vaho en el frío aire del domingo. La habitación está llena de humo silencioso (gargantas secas y bocas pegajosas), una incluso se comió su colilla la noche anterior.
¿No se puede vivir tan fuerte, princesitas? ¿No se puede morir tan suave?
Dímelo tú, Miss Take.
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sábado, 3 de noviembre de 2012
Miss Take, la chica tatuada
Si sois tan amables de recordar a nuestra chica tatuada (click, click)
"Simplemente... eres un error que tengo que cometer por un tiempo. Para entenderme del todo y llegar a ser quién debo ser. Pero no puedo mentirte, yo sé que mi destino no está con tus manos y tus labios de tabaco. Nunca, nunca lo estará. Lo siento."
En ese momento, a ella se le rompió el corazón en mil pedazos y el mundo se oscureció de golpe, a él le embargó una sensación de libertad que lo alzó flotando y lo sacó por la ventana, por encima de los edificios, de las montañas, de la atmósfera entera, pero sobre todo del humo de sus pitillos... Siguió subiendo y subiendo y alejándose de esa habitación claustrofóbica, hasta que la galaxia entera no fue más que una mota de luz diminuta que se confundía con miles otras...
Su cuerpo en la Tierra sonreía como un imbécil porque sabía que por fin sería feliz.